
La grieta gris
Por la grieta gris se atravesó el agua...
Y el páramo se ha llenado de verde.
Por la grieta gris se coló la luz...
Y la claridad se ofreció a aquellos que no veían.
Por la grieta gris se coló el fuego...
Y calentó a los que tenían frío.
Y por esa grieta gris, mi alma se cuela, queriendo encontrar destinos verdes, lucidos y ardientes.
Fronteras coloreadas, liberadas de espinas puntiagudas y miedos infundados.
¡Oíganme!...
Por la grieta gris, todos los mundos son bellos mundos.
La grieta gris parece estrecha, infranqueable...
Pero amigo, solo haz el intento de acercarte a ella...
Y verás dilatados ríos por los que cruzar navegando.
Ya no hay tempestades, ni soledades, ni heridas...
Hay una voz que canta en el nombre del amor. Entre susurros delicados y atrayentes.
La grieta gris parecía gris...
Pero... acaso lo era?
Lidía Camino Medina